El peak shaving es una técnica que ha ganado popularidad entre las empresas que buscan optimizar su consumo energético y reducir costos. En términos sencillos, el peak shaving consiste en reducir los picos de demanda energética durante horas de alta demanda. Estos picos son responsables de un incremento significativo en la factura eléctrica, ya que muchas tarifas están diseñadas para penalizar el uso elevado de energía en momentos críticos.
A través de soluciones de almacenamiento de energía, las empresas pueden cargar sus baterías durante períodos de baja demanda y utilizar esa energía almacenada durante los picos. Este proceso no solo alivia la carga sobre la red eléctrica, sino que también genera importantes ahorros para las empresas al evitar tarifas de penalización.
El peak shaving es especialmente útil en industrias con un alto consumo energético, como fábricas, centros de datos y grandes instalaciones industriales. Implementar esta técnica no solo contribuye al ahorro de costos, sino que también ayuda a reducir la huella de carbono al optimizar el uso de energía, alineándose con los objetivos de sostenibilidad empresarial.